Agradece...

En estos días, con tantos movimientos energéticos, ya no podemos quedarnos sentados.

Hablando del "despertar espiritual", hay una frase que he escuchado que reza: Cada quien cambia a su tiempo, a su ritmo y a su espacio. Pero también hay otra que dice: Cambia al ritmo que cambia el cambio porque si no, el cambio cambiará tu ritmo.

Cambiar significa adaptarte al ritmo del playlist que el universo nos pone a bailar, cambiar es aceptar toda la energía que el planeta está recibiendo y generando y fluir con ella, sin oponer resistencia. La resistencia genera pesadez y tropiezo y, realmente, no sirve de nada, porque la energía ya está generada y está transformando todo nuestro entorno, bien sea si creemos que es positiva o negativa, queda de nuestra parte ver el polo que nos conviene.

El Universo, El Creador, Dios, Jehová, Jesús, Señor o el nombre con el que lo quieras identificar está abriendo los caminos para nuestra transformación espiritual. Queda de nuestra parte creerlo o no. Es decisión nuestra seguir adelante, o simplemente quedarnos en el limbo que de que ya, con lo que tenemos aprendido es suficiente. Ya nos toca aplicar todos esos conocimientos, todos esos estudios espirituales, los libros, los cursos. Hay que tomar las riendas y responsabilizarnos, de manera individual, de nuestra alma, que está de visita en esta vida, para seguir evolucionando.

De nada sirve todo lo que hemos estudiado si seguimos esperando que ocurran cambios, mientras nosotros seguimos con la misma actitud, las mismas creencias, las mismas ideas.

Entonces, ¿qué hacemos? Prepárate, acepta y agradece la energía que estás recibiendo. Adáptate a la limpieza, sin miedo, sin dudas, sin culpas. Armonízate, cambia los pensamientos y la actitud que, hasta ahora, no te han servido o te bloquean. Y, ¿cómo hacemos esto?

Primero: Toma consciencia de que hay un movimiento energético que está generando cambios, internos y externos, en cada uno de nosotros.

Segundo: Medita. Meditar es permitirte conectar tu Yo interno (tu esencia) al Creador. Puedes ir con un grupo o buscar meditaciones en internet, pero primero agradece al Creador porque te acerca a las meditaciones que necesitas. Meditar te ayuda a alinearte a la Energía Creadora, te llena de paz y de la calma necesaria para equilibrarte a estos cambios energéticos.

Tercero: Ve a terapia. Suelta lastres, deja de vivir del pasado. Dale valor a tu día, vive tu vida consciente de que lo que tienes hoy es un cúmulo de aprendizajes, positivos y negativos, que te permiten ser y seleccionar lo que eres, a donde ir, qué soltar y que mantener, y seguir adelante, conectado al Creador.

Cuarto: ¡Agradece! Creo que, con estos cambios, lo que ha tomado desprevenida a mucha gente es la falta de agradecimiento. Estamos acostumbrados a buscar a Dios para pedirle y para preguntarle los porqués de nuestras vicisitudes... pero no para agradecer.

Agradece lo que tienes y lo que no tienes. Lo que tienes, grande o chico, material e inmaterial, para que tomes consciencia de todo lo que has recibido, de todo lo que has generado.

Agradecer lo que no tenemos es liberador, nos hace abrir los ojos a lo que realmente necesitamos y a dejar atrás las necesidades del ego. Además, tomamos consciencia de que, lo que no nos ha llegado es porque, a lo mejor, no lo necesitamos o todavía no es tiempo de que llegue, sin agobiarnos. Recuerda que Dios es nuestro Padre/Madre y Él siempre sabe lo que es mejor para nosotros, por lo tanto, confía. Mantén tu fe siempre viva.

Sigo manteniendo mi recomendación del cuaderno de agradecimientos, llévalo como un diario en el que, todos los días, agradezcas todas las situaciones, ideas, pensamientos, sentimientos y personas que están en tu vida... ya que, son tus maestros.

Te dejo unas meditaciones, un video con consejos y un mantra de protección para que te ayudes, no sin antes volver a recomendar que busques un grupo de meditación y que, además, te apoyes en tu terapeuta.

Agradezco al Creador el que nos llene de sus maravillosas bendiciones y su amor incondicional cada día de nuestra vida.

Como siempre es un placer compartir contigo. Nos vemos la próxima

LO SIENTO... por las memorias de dolor que comparto contigo.

PERDÓNAME... por haber unido mi camino al tuyo para sanar.

TE AMO... por ser quien eres. GRACIAS... porque estás aquí para mí.

Mirtha Vasquez

MEDITACIÓN PARA LIBERAR EMOCIONES NEGATIVAS